Morfeo y yo
Morfeo es su
nombre y el sueño, su bendito don.
Le espero cada
noche impaciente como una virgen enamorada, abiertas las ventanas del deseo, ansiosa
por comenzar el ritual y sentir cómo me toma sin prisas. Él, en pago a mi devoción
o tal vez para hacerse perdonar la eterna impuntualidad, se engalana para la
cita y me acoge amoroso entre sus brazos acallando al instante mis miedos. Ya
está conmigo, me mece con languidez, casi con desidia, y oscila caprichoso
entre la vigilia y la inconsciencia en un balanceo hipnótico. Es, una y otra
vez, como si no tuviera más que decidido hacia qué lado del atrayente
precipicio me dejará caer. Siempre igual, siempre diferente. Yo me dejo hacer
con entrega total.
Me acaricia
la frente y se lleva las arrugas, las preocupaciones. Las recicla en su sonrisa
benéfica y me las devuelve convertidas en sueños que no pueden hacerme daño.
Me besa
pausado en los labios, los humedece con su aliento de luna llena e imprime en
ellos la dosis justa de olvido.
Toma mi mano
entre las suyas tibias, las arropa como a un gorrión herido y echa a volar las
caricias que tenía reservadas para él.
Vierte en mi
oído trabalenguas hechos de música que enredan mi pensamiento al suyo y olvido
quién soy, cuál es mi vida.
Ata con
paciencia mi cuerpo a los designios de su imaginación, a sus fantasías de
amante experimentado; debo comprender que nunca seré de nadie más.
Morfeo me
indica enigmático el camino y le sigo. El tobogán en forma de espiral infinita
me espera para alejarme más y más de la realidad. Ahora todo encaja y todo
parece fuera de lugar; nada tiene sentido y nada escapa a la lógica. Le siento
tan dentro que ya forma parte de mí, no quisiera tener que hacer nunca el
camino de vuelta.
No sé si él
me piensa cuando no me visita, si me echa de menos; no sé a cuántos cuerpos
cansados más da consuelo y descanso mientras no está conmigo. Tampoco quiero
saberlo, me destrozarían los celos. Solo sé que a veces me siento tentada de
provocarle, de ponerle a prueba, y planeo infidelidades que finalmente no me
atrevo a consumar. Temo que mi órdago sea el final de nuestro romance, así que
una vez más descarto el café y los estimulantes y vuelvo a esperarle vencida,
ataviada de deseo, al llegar la noche.
Julia C.
Cambil
Morfeo visita a Julia C, preciosa y poética prosa
ResponderEliminarMuchas gracias, Mamen, me alegro de que te haya gustado. Seguro que también a tí te visita seductor en las noches... :)
Eliminar¡Un abrazo!
Nos dibujas a un Morfeo enigmático y sensual, nunca pensé en él así y sin embargo, me ha gustado mucho.
ResponderEliminarVeo conexión además, con el relato anterior, aunque sea radicalmente distinto a su vez. Las noches y los sueños...dan para mucho, verdad?
Un beso, querida Julia.
En mi caso sí, Noelia, el sueño y su personificación en Morfeo me ha inspirado muchos textos a lo largo del tiempo. Ya ves, tú nunca le has visto así y yo siempre, como un amante que a veces es esquivo pero por el que merece la pena esperar...
EliminarMe alegro mucho de que te haya gustado, ¡muchas gracias por venir!
Besitos de jueves.
Una versión de Morfeo muy sensual y muy original. Muy poética también. Me ha encantado, Julia.
ResponderEliminarMe alegro mucho, Marta, ¡muchas gracias!
EliminarCreo que tú sabes mucho de prosa poética, así que me tomo tus palabras como un gran regalo :))
¡Un beso grande!
Vaya Morfeo más atractivo Julia y lo mucho que se lo echa de menos.
ResponderEliminarMe ha gustado el tratamiento que le has dado a ese acto tan cotidiano al que has ensalzado hasta el lugar que se merece como el más amoroso de los amantes y al que tanto se echa en falta cuando se hace el esquivo.
Besos
Ainssss Conxita, yo creo que todos hemos suspirado por él en alguna ocasión y le hemos echado en falta con auténtica desesperación. Incluso hay quien tiene con él una relación amor-odio, ¿cómo no compararlo con un amante? A mí desde luego es lo que me sugiere siempre que trato de imaginarlo :)
EliminarMe alegro de que te haya gustado y te haya resultado sugerente, ¡muchas gracias!
Un beso grande de jueves.
Vaya preciosidad has creado Julia, en aras a ese Morfeo tan deseado y amado por hombres, mujeres y siempre muy amigo de los compañeros gatunos que desde luego se llevan de maravilla con él ;-). Y además, su ausencia ha hecho grandes fortunas en la industria farmacéutica...
ResponderEliminarUn abrazo y felicidades por un texto lleno de sensibilidad, sensualidad y arte.
Creo que los gatos casan a la perfección con el tono del relato por ser unas criaturas tan hermosas y enigmáticas; las farmaceúticas, en cambio, algo menos jajaja. En cualquier caso estás en lo cierto, y lo dice una que más de una vez necesita una ayudita para conciliar el sueño :(
EliminarUn millón de gracias por tus generosos calificativos para el texto, Miguel, ¡estoy más que satisfecha! Me alegro muchísimo de que te haya gustado :))
¡Abrazos dormilones!
Se ve que a ti te quiere más que a mí. Desde luego, no soy yo una de las que atiende cuando no está contigo. Conmigo es desatento, impuntual, antipático... pero he conseguido engañarle. Me atavío con sustancias atractivas para él y termino por conjurarlo a mi lado, pero me cuesta lo mío.
ResponderEliminarPrecioso y sugerente relato.
Un beso.
Bueno, no creas que a mí me quiere tanto, Rosa. Tenemos nuestros más y nuestros menos, va por rachas. Aún así, o será precisamente por eso, es por lo que tantas veces le he convertido en protagonista de mis textos. Yo estoy entregada y siempre dispuesta a la relación; él se permite el lujo de darme calabazas en más de una ocasión :P
EliminarEres una chica lista, no dudo de que tienes tus "mañas" para conseguir tenerle contigo :))
Me alegro mucho de que te haya gustado, ¡muchas gracias!
Besitos dormilones.
¡Olé!
ResponderEliminarQué palabras más bellas has escogido para tu narración.
Creo que has descrito muy dulcemente la sensación que a todos nos embarga cuando, al meternos en la cama, notamos cómo nos va venciendo el sueño ¡Cuánto me gusta esa sensación!
Hubo un tiempo en que Morfeo y yo discutimos. Fue horrible. Recurrí a aliados para ganarle la partida, pero el sueño no era igual. Así que después de aquello, decidí que no habría nunca más nada en la vida que me imposibilitara dormir. Y así ha sido hasta hoy. Todos los problemas y las vueltas que le damos a las cosas pueden esperar a la luz del día. Aunque como ya sabes, también soy amiga de siestas porque, desde que nació Macarena, me acostumbré a dormir pocas horas para poder hacer todas mis cosas mientras ella descansaba. Así que me he convertido en un ave nocturna y compenso la falta de horas de descanso con una buena siesta de pijama y cama.
Y no me enrollo más, que tengo incontinencia verbal.
Me ha gustado mucho la entrada de hoy
Muchos besos
No sabes cuánta envidia me das, Macarena. Yo hago ese mismo razonamiento, que las preocupaciones no se resuelven por no dormir, más bien al contrario, pero no hay manera. Como tenga la más mínima cosa en mente, ya no pego ojo. Ojalá algún día llegue a lograr lo que tú :) Respecto a las siestas "de cama y pijama", como tú las llamas, pues me parecen genial si te permiten aprovechar mejor tu tiempo. Una de mis hermanas también se organiza así, y no la despiertes en la siesta que puede ser que te asesine jajajajjaa.
EliminarMe alegro mucho de que te haya gustado el texto. La verdad es que siento fascinación por Morfeo y la sensaciones que nos hace sentir antes de que ya no nos enteremos de nada. Ese caer lentamente... ¡mola! :))
Besitos de viernes, guapa.
¡Qué precioso texto, Julia! Una prosa delicada, sentida, en la que consigues una relación casi, y sin el casi, sensual con el dios del sueño. Desde luego, este texto no se escribe solo en un momento de inspiración, se nota que hay algo mucho más profundo y meditado antes de que haya germinado en forma de relato.
ResponderEliminarMi relación con Morfeo es casi inexistente, o muy intensa según se mire. Cuando pillo la cama no tardo ni medio segundo en caer en sus brazos, me haya tomado veinte cafés y un par de coca colas.
Por cierto, me encanta cómo has trabajado la ilustración con el Canva. Creo que es toda una invitación a hacer clic en la publicación. Un fortísimo abrazo!!
Holitas, David :)
EliminarSi la ilustración del texto está aunque solo sea medio bien, te lo debo a tí. A pesar de lo torpe que soy el Canva no me da muchos quebraderos de cabeza y, tal y como nos prometiste, me permite hacer muchas cosas. Para mí ha sido todo un descubrimiento y estoy muy contenta con él. Si alguna vez llegamos a conocernos, recuérdame que te debo una cervecita como mínimo ;)
Qué perceptivo eres, compañero. Efectivamente este texto y otros que tienen como centro a Morfeo o el tema del sueño, no son cosa solo de la inpiración del momento, sino de una fascinación absoluta por todo el proceso de dormir, soñar, descansar o justo lo contrario, no poder hacer ninguna de estas cosas aunque quieras. Yo siempre he dormido mal porque soy muy nerviosa y me preocupo por todo, así que tener a Morfeo de amante, con el poder que eso te confiere, me parece una idea de lo más atrayente...
Qué envidia me das. Si yo me tomo un café o una cocacola después de las tres del medio día, ya no pego un ojo. Debes de tener la conciencia muuuuy tranquila jajajajjaa.
Muchas gracias por venir, me alegro de que te haya gustado el texto :))
Te dejo besos y mis deseos de que Morfeo nunca falte a su cita contigo siempre que necesites "verle" :)) ¡Buen finde, compañero!
Prosa poética que te va llevando a dormir con dulce y deliciosa imaginación, logré pintar en mi mente tantas cosas Mi Julia.
ResponderEliminargracias!
"El tobogán en forma de espiral infinita me espera para alejarme más y más de la realidad."
Que mi texto le haya gustado a una dotada para la poesía como tú, querida Ady, ya es para estar contenta. ¡Las gracias a ti, mi niña! Creo que a tu fértil imaginación le hace falta muy poco para dejarse llevar y echar a volar.
EliminarUn gusto tenerte aquí y leerte.
¡Besitos de finde!
Ay, Julia, que preciosidad de post
ResponderEliminarMe encanta la forma en que humanizas el acto de dormir, encarnándolo en un Morfeo amante y complaciente. Es bellísima la forma en que describes cómo vas cayendo en el sueño, pura prosa poética.
A mi Morfeo me esquiva últimamente, pero a veces Fibi toma el relevo. Me la subo a la cama, se me enrosca en las piernas y nos quedamos fritas las dos.
Me ha fascinado leerte, Julia. Felicidades por este post tan precioso.
Ainsssss muchísimas gracias por un comentario tan generos y entusiasta, Chari, ¡me ha dado un subidón de autoestima bloguera! :))
EliminarTu Fibi es un amor. Por las cosas que nos cuentas no hay compañera más fiel ni que más se preocupe por tí, y entiendo que tenerla cerquita, sintiendo su calor y su compañía, te relajes hasta dormirte. Me alegro de que así sea porque Morfeo a veces se pone tan díscolo...
A mí me ha encantado tu visita. Después de tanto tiempo de ausencia, tenerte por aquí de nuevo, es un gustazo.
¡Besitos de finde, guapa!
Me ha encantado esa metáfora con el sueño y el amor. Qué bien lo has descrito y con cuánta poesía.
ResponderEliminarMorfeo conmigo es un amante fiel, tampoco es que se esfuerce mucho porque yo soy una novia poco exigente y muy facilona (me duermo en cuanto toco la almohada, e incluso antes, ja, ja, ja). La que no es fiel en esa relación, tengo que confesarlo, soy yo. Me voy con el café de parranda y dejo mi encuentro con Morfeo para más tarde. Cualquier día me abandona por casquivana y lo echaré de menos, seguro.
Enhorabuena por este texto tan bello, Julia, me ha gustado mucho.
Un beso grande.
Hola, Paloma
EliminarLeyendo tu comentario no he podido evitar pensar que deberías escribir una entrada ampliándolo un poco y ofreciendo "otra perspectiva" de esta relación que tan idílicamente yo he reflejado. La mía ha sido poética; la tuya sería para matarse de risa jajajaja. ¡Qué cosas tienes! Dicho queda, por si te animas... :)
Hasta ahora y ya ha habido unos pocos comentarios, creo que eres la única lectora que se atreve a darle plantón a Morfeo. Los demás todos suspiramos porque tenga a bien acudir a la cita. ¡Eres muy afortunada!
Me alegro mucho de que te haya gustado el texto, me pone muy contenta saberlo. ¡Gracias, guapa!
Besitos y feliz finde.
Recojo el guante que me lanzas, Julia. Y lo hago gustosa. Contaré mi relación con Morfeo, y será más pronto que tarde porque ya tengo ganas de escribir algo en plan gamberro. Desde que hago el curso de escritura escribo más seriamente y me estoy poniendo algo mustia. Lo mismo es el síndrome de abstinencia.
EliminarGracias por la invitación, guapetona.
Un besote.
¡Genial, me alegro mucho! Ya estoy deseando leer esa entrada gamberra al más puro estilo Paloma :))
EliminarUn beso y que las musas te acompañen.
Repetimos (escribí un comentario pero no quedó publicado):
ResponderEliminarCada vez te superas más y más con tus prosa poética, citando en esta ocasión a un Morfeo dulce y complaciente. Supongo que, al igual que los ángeles, no debe tener sexo. De lo contrario, me pediría la versión femenina, que debe ser más delicada y sensual, si cabe.
Pero enamorarse de Morfeo puede tener malas consecuencias, como esos celos ante su ausencia. Puede ser algo adictivo y, como toda adicción, su falta provoca un síndrome de abstinencia, jeje.
Un gusto leer tus letras, Julia.
No me había parado a pensarlo, Josep, pero efectivamente lo propio sería que Morfeo no tuviera sexo. Así podría ser igualmente deseado por todos en el plano amoroso y todos podríamos dejarnos seducir a placer... ¡Concedido, para ti la versión femenina! :D
EliminarYo es que no puedo pensar en Morfeo más que como un amante, y no de ahora, sino de siempre. Así es que tu advertencia resulta completamente adecuada, ¡ojo a los celos y a la dependencia-adicción! Espero ser lo bastante equilibrada como para no caer en ninguno de esos extremos por más "enamorada" de él que esté :))
Para mí el gusto es leer comentarios como el tuyo, ¡muchas gracias!
¡¡Un abrazo enorme y feliz finde!!
Me gustan tus letras claras y como vas viendo la realidad de tus pensamientos
ResponderEliminarun abrazo desde Miami
Muchas gracias, Recomenzar, y bienvenida al blog :)
Eliminar¡Un abrazo grande también para ti!
te siento con mucha paz interior yo en cambio soy una guerrera de los sueños de mi vida
EliminarBueno, mi paz va por momentos y etapas de la vida, pero desde luego es algo a lo que aspiro en todo momento. Suena bastante bien eso de ser "una guerrera de los sueños de la vida", es una imagen hermosa :))
EliminarEstoy contenta de que hayas llegado a este blog.
Hola, Julia!
ResponderEliminarPor fin paso a conocer tu nuevo rincón. Ya me parecía raro que llevases tanto sin publicar en tu antiguo blog. Dimitiendo de mí tiene ya un título prometedor, espero que su duración sea duradera y próspera :)
En cuanto al relato, sugerente y escrito con una capacidad descriptiva que deja sin aliento.
Morfeo es amante de todos, pero no se compromete con nadie.
Un fuerte abrazo.
Holitas, Sofía, ¡bienllegada a mi nueva morada! :))
EliminarMe alegro mucho de que te guste el título del blog. Creo que me hacía falta un cambio y nada tan diferente como dejar de ser lo que se ha sido hasta ese momento. Seguramente no lo consiga, quizás ni sea aconsejable tampoco, pero por lo pronto la idea me ha dado para encontrarle un título llamativo al blog. Mil gracias por tus buenos deseos, que ojalá se cumplan :))
Respecto al relato, me encanta la frase que has usado. Muy cierto que "Morfeo es amante de todos pero no se compromete con nadie". Muy mal negocio para ser celosa :D Tu buena opinión del texto me sube la autoestima, muchas gracias.
¡¡Un besazo y feliz finde!!
Bello texto Julia. Te queda muy bien la prosa poética. Creo que Morfeo es el mejor amante que se puede tener, porque un sueño reparador es lo mejor que le puede pasar a un cuerpo cansado físicamente o a una mente atribulada. Ojalá se dejara ver más a menudo; con algunos (conmigo, por ejemplo) es muy esquivo. Igual es que no le dedico palabras tan preciosas como las tuyas...
ResponderEliminarEnhorabuena por tan genial relato.
Besazos guapísima.
Qué cosas tan bonitas me dices en tu comentario, Ziortza, ¡muchas gracias!. La verdad es que yo antes, hace bastantes años, escribía mucha prosa poética. Luego me fui haciendo más prosaica, más clara en el lenguaje y las formas de expresión y me dediqué a contar historias. Ni idea de por qué se produjo el cambio, pero tuvo lugar.
EliminarSiento que Morfeo sea tan esquivo contigo. Quizás solo lo hace para mantener tu interés, para ponerte a prueba y mantenerte pendiente de sus visitas. Ningún amante que se precie deja de tener sus técnicas de seducción...
¡¡Un besaz enorme de finde y gracias de nuevo!!
Qué bonito Julia,... a pesar de que me llevo bastante mla con tu amante,... pero he de reconocer que os envidio,... ya me gustaría a mi caer en sus brazos!
ResponderEliminarMorfeo es caprichoso, Norte, y tampoco a mí me es fiel por mucho tiempo. Cuando menos lo esperes irá a visitarte y quizás se quede contigo una larga temporada :)
EliminarMe alegro mucho de que te haya gustado, ¡muchas gracias!
Un abrazo.
Muy bonito tu texto.
ResponderEliminarUn abrazo
Muchas gracias, Betty, ¡encantada de que te haya gustado!
EliminarUn abrazo grande también para ti.
Ya el titulo me pareció genial Julia, pues todos pasamos por sus manos queramos o no, y estoy segura que la mayoría quiere, ja, ja.
ResponderEliminarHubo un tiempo en que creí que conmigo tiro la toalla y dejo a un lado sus intentos de seducción, pero últimamente o me estoy volviendo dócil y vulnerable a sus susurros, o se ha disfrazado de ese amante tan sensual que describes tan poeticamente.
Pero mas que nada, creo que he soltado mi empeño en que llegue y me tome en sus brazos, ya sabe que me es indiferente, y por eso herido su amor propio, llamado mi atención, me visita mas a menudo y se queda quieto mirándome hasta verme rendida en pura contemplación.
Julia lo tuyo es de fabrica, se conjugaron en el momento de tu concepción, la creatividad, la genialidad, la poesía y la osadía literaria, porque me parece que en el útero de tu madre ya escribías y jugabas con las letras, ja, ja.
Buenísimo y muy reconfortante esa vision de Morfeo, el amante imperfecto de todos, pero deseado por igual.
Abrazos y besos.
Veo que has asimilado por completo la forma de ver a Morfeo en este texto: ese amante del que no podemos renegar por mucho tiempo aunque queramos y al que todos deseamos. Y veo también que tienes tus tácticas para reneterle a tu lado... ¡ni más ni menos que haciéndole ver que no te interesa demasiado! Pues me parece muy bien, porque por propia experiencia sé que si le deseas con demasiadas ganas, se resiste a visitarte. Qué pillina, Harolina, todos los días se aprende algo jajajajaa.
EliminarLo único bueno de que este amante "pase" un poco de nosotras es que nos cunde mucho más el tiempo. Y no es que dormir sea perderlo, pero... Como suele decirse, el que no se consuela es porque no quiere :))
Un millón de gracias por esas palabras que me dedicas. No recuerdo si jugaba con letras ya en el útero de mi madre, pero fuera de él, seguro que sí.
Me alegro infinito de que te haya gustado el texto. Para mí es muy gratificante.
Un abrazo enorme, amiga, y ojalá estés teniendo un feliz fin de semana.
Qué preciosidad de imagine conjuras para nosotros, Julia. ¿Un amante? En ese caso es el más polígamo de la historia de la Humanidad ;-)
ResponderEliminarUn beso y muchísimas gracias por compartirlo con todos.
No puedo contrariarte, Santiago: el amante más pródigo en aventuras que nadie haya conocido. A pesar de todo le perdono, cada noche, si tiene a bien visitarme. ¡Tendré que hacérmelo mirar! :DD
EliminarOtro beso para ti y gracias a ti por acercarte hasta aquí.
Precioso!!! No te preocupes, por muchos estimulates que tomes, Morfeo siempre termina por volver.
ResponderEliminarUn abrazo
Muchas gracias, David. Me alegro de que te haya gustado :)
EliminarProcuraré recordar tus palabras la próxima vez que me desespere por su ausencia.
Un abrazo también para ti.
¡Hola querida, Julia!
ResponderEliminarPreciosa prosa poética, escrita con gusto, cariño deseo... seguro que Morfeo la ha leído y dado por aludido viniendo de seguida la próxima vez que le necesites. Ojalá. Amante tan conocido y esperado por quienes anhelamos mecernos en sus acogedores brazos y abrazos cuando el sueño parece querer alejarse y la mente no para de extraviarse.
El amante perfecto para llevarnos a la realidad en donde se pierde la cotidianidad y se experimenta la reparación del cuerpo y mucho más. Creo que debemos confiar en él y esperar sin pensar qué no tiene más remedio que venir a acariciarnos...
Le alzaste muy bien con tus seductoras letras, si alguna noche se retrasa en venir a buscarme recurriré a tu maravilloso llamado.
Encantadísima de leerte y comprobar que este estilo de contar historia se te da igual de genial que todo lo que escribes.
¡Un enorme abrazo!!
Ainssss muchas gracias, querida Mila. Ya sabes lo mal que se me da la poesía en todos los aspectos, así que esto, la prosa poética, es lo que más me permite acercarme a ese género. Si a tí te ha gustado, me doy por satisfecha con creces :))
EliminarEspero de veras que sea como tú dices y que Morfeo haya leído mi texto. Ojalá de ahora en adelante se encuentre más proclive a visitarme siempre que lo necesite. ¡Sería genial! jajajaja. Si aún puedo pedir un poco más, deseo que también acuda puntual siempre a tu llamado. Parece que dormir es no hacer nada, pero qué necesario es para "funcionar" correctamente cuando estamos despiertos, verdad?
A mí también me gustaron mucho tus letras. Parece que respecto a este amante esquivo estamos en la misma sintonía :)) Muy honrada con tu comentario, preciosa.
¡Feliz comienzo de semana y un abrazo gigante!
Ya vi que cambiaste de blog y aquí estoy .
ResponderEliminarMe encantó tu relato, la forma tan bonita y humana con la que has tratado a Morfeo. Ay el dios de los buenos sueños que gran inspirador de historias y que agradecido es.
Un beso
Bienvenida, Mariola, ¡qué bueno que encontraste el camino! :)
EliminarPara mí Morfeo solo puede ser un amante que nos da tantas alegrías como veces nos hace sufrir, no lo concibo de otro modo, y me alegro mucho de que te haya gustado la forma de tratarlo. ¡Muchas gracias!
Un beso enorme también para ti, me ha encantado tenerte en ese rinconcito :))
Una dulzura que mece y adormece, al mayor de los placeres y necesidades. Un texto bonito y original. Bravo!
ResponderEliminarHola, Miguel Ángel, ¡qué gusto verte por mi nuevo blog! Bienvenido :)
EliminarMe alegro de que te haya gustado el texto. Como bien apuntas dormir no es solo un placer, sino también una necesidad. Más nos vale llevarnos bien con Morfeo :))
¡Un beso de martes!
Me ha gustado mucho la forma en que describes los complicados sentimientos que provoca el deseo (en este caso de dormir, que no es poca cosa). Un saludo y feliz tarde de martes!
ResponderEliminarMuchas gracias, Ana María. Quizás cada persona sienta de una forma única ese deseo, sea cual sea el objeto, pero nos resulta muy fácil reconocernos en rasgos comunes a todos. ¿Quién no quiere "llevarse bien" con Morfeo? :))
EliminarUn afectuoso saludo también para ti y bienvenida a este blog.
jajaj no había leído esta entrada Julia, me ha encantado la originalidad de pintarlo como un amante. Me ha gustado mucho, un besote guapa!
ResponderEliminarUn amante que espero no se canse de mí en la vida, María jajajaa.
EliminarMuchas gracias, guapa, me alegro de que te haya gustado :))
¡Besitos y buen comienzo de semana!
¡Hola Julia! Vengo de la mano de Paloma, ya que me estoy reincorporando a este mundillo y, aunque lo hago por orden de entradas de una semana a esta parte, la de ella me ha traído a esta tuya más atrasada y que no he podido evitar leer, y me alegro de haberlo hecho porque es realmente precioso el texto y lo ocurrente del mismo.
ResponderEliminarNo cabe duda que todos quisiéramos que Morfeo fuera nuestro fiel amante durante toda la noche, pero es tal cual lo defines muchas veces (al menos en mi caso).
Yo intento llamar su atención yéndome a correr ahora que empieza el buen tiempo y evitando a Café (con el que también ha confesado Paloma que flirtea), y la mayoría de las veces "pica".
Destacaría de tu texto lo de que "se lleva ... las preocupaciones. Las recicla en su sonrisa benéfica y me las devuelve convertidas en sueños que no pueden hacerme daño", ¡precioso no, preciosísimo!
Bueno solete, te dejo, que voy a ponerme casi el vestido de noche porque hoy creo que vendrá pronto ;-)
Un beso enormeee
Mil gracias por haber venido hasta aquí, querida Chelo. Yo que llevo retraso en las lecturas cada dos por tres debido a mis viajes para ver a la familia, comprendo muy bien lo que es tratar de ponerse al día. En fin, son gajes del oficio de blogueras, ¿no? :DD
EliminarMe alegro mucho de que el texto te haya gustado. Lo empecé hace muchísmo y ahí estaba, muerto de asco en una carpeta, hasta que hace poco lo rescaté y pude terminarlo. Si Morfeo es mi amante, tampoco me privo de "tontear" con las musas jajajajaja.
Creo que tu método para llamar la atención del díscolo Morfeo es uno de los mejores. Caer cansada en la cama suele funcionar muy bien y si no, pues al menos estarás en plena forma :))
Lo dicho, mil gracias por el esfuerzo y por tus generosas palabras.
¡Un besito enoooorme y feliz sábado, guapísima!
Una singular versión del popular dios del sueño escrita con prosa cuidada que evoca una vorágine de íntimas sensaciones.
ResponderEliminarSuerte en el concurso de "El Tintero"
Un abrazo, Julia.
Así es, Paco, esta es mi versión de Morfeo, la única que siempre he tenido de él :)) Me alegro de haber podido transmitirte esas sensaciones, que quizás compartas o no.
EliminarMuchas gracias, compañero, ¡lo mismo te deseo!
Un abrazo de vuelta y feliz tarde de domingo.
Hola Julia, precioso texto. Una bella prosa que nos transporta junto a la protagonista hacia el dulce camino del sueño. Encuentro tu idea muy original. Te felicito por ello. Un abrazo.
ResponderEliminarUn millón de gracias, Miry, me alegro muchísimo de que te haya gustado. Morfeo y yo nunca nos hemos llevado demasiado bien, así que puede que en el fondo solo esté tratando de halagarle para ver si "lo nuestro" mejora :))
EliminarUn abrazo enorme también para ti y feliz tarde de domingo.
Hola Julia, Morfeo, Morfeo, qué texto poético, no te había leído mucho así, yo he caído rendida en sus brazos. Palabras sutiles para enamorarte del sueño. La noche que no pueda dormirme pensaré en él en su abrazo, su beso, su...locura de amor. Un beso Julia.
ResponderEliminarHolitas, Eme :)
EliminarEs cierto que pocas veces mis textos tienen este "tono", pero es que Morfeo es tan especial para mí, que no podría hablar de él de otra manera. Ya me contarás si concebirlo tú también como un amante dulce y complaciente te funciona. ¡Ojalá que sí! :))
Un beso grande y muchas gracias por venir.
Hola Julia!
ResponderEliminarUna hermosa prosa plena de lírica para adular al mítico dios griego, elevado a la categoría de amante nocturno, con un estilo narrativo lleno de belleza, para que el lector se deje llevar por la fantasía que se le propone en este canto, porque más que prosa parece un canto por la melodía que uno escucha cuando lee.
Un trabajo exquisito. Felicitaciones. Mucha suerte en el concurso del tintero.
Ariel
Siempre tan amable y generoso, Raúl, ¡un millón de gracias!
EliminarYo soy una completa negada para la poesía, pero siempre he concebido a Morfeo como ese amante que otroga dones y no podía hablar de él en simple prosa. Te diré que tenía este texto empezado hace años y que no lo había podido terminar hasta ahora. Serán cosas del "amor" ;)
Tu comentario me ha hecho sentir muy satisfecha, estoy feliz de que te haya gustado.
Un abrazo grande para ti e igualmente mis mejores deseos en el concurso. ¡Nos vemos en la gala! :))
¡Qué hermoso, Julia!
ResponderEliminarAcabo de leerlo y me ha encantado.
Me han gustado mucho también los comentarios, te mereces todos y cada uno.
No te pongas celosa, pero yo también tengo una íntima y buena relación con Morfeo y no digamos Sol y Luna, mis dos gatos ¡qué poses adoptan! ¡qué cara de placer ponen! .
Un abrazote
Muchísimas gracias, Ana, me alegro infinito de que te haya gustado :))
EliminarVale, procuraré contener mis celos, especialmente porque me alegro de que muchos de vosotros descanséis a placer en brazos de tan experimentado amante. Voy a tener que aprender a compartir jajajaja.
Besos para ti y mimos para Sol y Luna (preciosos nombres, por cierto). ¡Nos vemos en la gala del Tintero!
¡Qué originalidad! ¡Qué imágenes tan bonitas y sensuales! Nunca he tenido tanto insomnio como para darme cuenta de los encantos de Morfeo, gracias a Dios. Un abrazo.
ResponderEliminarPues me alegro mucho, Beba, sentirse abandonada por Morfeo no es nada divertido, y te lo dice alguien que ha sufrido sus desplantes en épocas prolongadas de su vida. Quizás por eso lo concibo así, como un amante al que hay que conquistar.
EliminarMe alegro mucho de que te haya gustado. ¡Muchas gracias!
Un beso y nos vemos en el concurso :)
Precioso texto, Julia. Morfeo debe sentirse alagado por tu relato poético, y volverá a visitarte gustoso cada vez que le esperes.
ResponderEliminarSuerte en El Tintero. Un abrazo.
Espero que sí, Carmen, porque por temporadas se pone muy díscolo y me cuesta horrores que acuda a la cita.
EliminarMuchas gracias por tu generoso comentario, me alegro de que te haya gustado.
¡Besos, nos vemos en la gala del Tintero! :))
Probando probando... soy Atis-Tirma-Tara-Isabel
ResponderEliminarJulia, que ya volveré a leer con calma y tiempo.
Hasta pronto compañera.
Cuando tú quieras y puedas, Tara. Y gracias por sacarme de mi despiste :))
Eliminar¡Feliz miércoles, compañera!
Morfeo como Don Juan o vampiro romántico. Una visión muy personal y fresca. Me ha gustado, Julia.
ResponderEliminarMucha suerte en el concurso.
"Vampiro romántico"... ¡me gusta! Hasta la presente no aprecié en mi cuello huellas de sus mordiscos, pero a saber cómo muerde Morfeo... :))
EliminarMe alegro de que te haya gustado, Bruno. Un abrazo y muchas gracias por la visita.
¡Nos vemos en la gala del Tintero!
Hermosa forma de describir a Morfeo, es como un amante que fielmente acude a tu cita y se muestra tal y como es relajado , dulce y acariciador.
ResponderEliminarYo tengo una buena relación con él , me dejo mecer en sus brazos y que me susurre al oído lo que quiero oír.
Buen texto Julia.
Un abrazo y suerte en el concurso El tintero de Oro.
Puri
Me alegro de que te haya gustado, Puri. Seguramente cada uno tiene su propia concepción de Morfeo, pero a mí me encanta pensar que es un amante al que seducir y por el que dejarme seducir :))
EliminarEs genial que contigo se porte tan bien, ¡tienes mucha suerte! Es un rollo eso de pasarse la noche esperando a ver si decide venir o no...
Muchas gracias por tu visita, compañera, y mucha suerte también para ti. ¡Nos vemos en la gala del Tintero!
Un abrazo.
Buen relato.
ResponderEliminarSuerte en el Tintero.
Un abrazo.
Gracias, Macondo :)
Eliminar¡Un abrazo también para ti!
Sin duda Julia, es poesía. Bueno, vale, prosa poética, poesía al fin.
ResponderEliminarHay cadencia, y hasta cierta candencia en el abrazo amoroso con Morfeo.
Para leer saboreando cada frase.
Un abrazo Julia, suerte en nuestro ya mítico tintero.
Yo soy un auténtico desastre para la poesía, Tara, pero de vez en cuando las musas se me ponen poéticas y éste es el resultado. Me alegro si te ha gustado :)
Eliminar¡Muchas gracias por la visita y otro abrazo grande para ti! También yo te deseo much suerte en el Tintero. Nos vemos en la gala.
Me encanta el ritmo pausado, como de duermevela, que has dado al relato. Una forma poética de describir el proceso del sueño y de dar romanticismo al insomnio. Enhorabuena, mucha suerte en El Tintero, Julia.
ResponderEliminarMe alegro mucho de que te haya gustado, Bea, ¡muchas gracias!
EliminarTambién yo te deseo mucha suerte en el concurso. Nos vemos en la gala :))
No seré el primero en decirlo pero efectivamente es poesía este relato, donde cada frase está cuidada hasta el extremo. Ese romance entre morpheo y la protagonista, esa historia de celos, de amor y desamor, ese esperar a que llegue la noche para que el sueño la venza y empiece el cortejo, nos atrapa hasta el final. He visto que presentas el relato al Tintero, te deseo muchas suerte, Julia. Un abrazo.
ResponderEliminarMuchas gracias, Jorge. Veremos qué dice "el jurado" :))
EliminarTambién yo lo he dicho ya en otros comentarios, pero es la única forma en que concibo a Morfeo, como un amante al que hay que seducir y por el que hay que dejarse seducir. Mi relación con él a lo largo de los años ha sido muy desigual, así que digamos que sé lo que es perderle y también tenerle rendido a los pies. Me alegro de que encuentres el texto cuidado, es una satisfacción para mí.
¡Un saludo y feliz día!
¡Wow! Precioso, Julia. Qué arte el tuyo para poner los dientes largos al lector, lectora, en este caso. Hasta ganas me han dado de darte un empujón para ocupar tu lugar y he soñado que envuelta en la noche como estaba, Morfeo no se daba cuenta del cambio y me tomaba.
ResponderEliminar¡Felicidades, preciosa y éxito en el concurso!
Un millón de gracias por tu amable y entusiasta comentario, María Pilar. Me alegro mucho de que te haya gustado.
EliminarMorfeo es el amante perfecto para todos los que estamos enamorados de él, pero no está permitido tener celos, así que... ¡bienvenida a su harén! :))
El fallo del concurso no me ha favorecido, pero si os ha gustado a los lectores, yo ya estoy feliz.
¡Un beso grande y feliz jueves!